lunes, 21 de septiembre de 2015

Adiós

Almas en un patio de juegos, sádicos, inevitables, juegos de muerte y desolación.

Caminamos, nos encontramos y nos decimos adiós. Adiós antes de que te vaya mejor, adiós antes de que me destroces el corazón, adiós por si acaso nos morimos antes o después. Solo adiós. Un adiós que duele en el recuerdo, que araña por dentro, que nos deja solos en un claro de sombras y lamentos, un adiós que se disipa en el viento.

Ni la mayor de las fuerzas impedirá que nos demos la mano y un abrazo, quizá un par de besos. Adiós por las lágrimas que hemos contado, por los polvos que hemos echado, por el apoyo mutuo que no sabemos darnos.

Adiós si te quiero, adiós si el odio nos une como a dos gotas de lluvia en un charco de palabras y sentimientos, de momentos. Adiós por todos los días que nos levantamos pensando que jamás íbamos a volver a vernos, que lo que pasó pasó y puede jurarlo el firmamento. Adiós cuando doblemos la esquina, por si al dar la vuelta ya no nos vemos. 

Adiós para siempre, adiós hasta que vuelva a salir el sol, adiós si haces las maletas, adiós si nos perdemos. Adiós por un hasta luego, adiós si ya no podemos más con ello.

Adiós hasta que lloremos alcohol, adiós cuando separemos nuestros cuerpos, que si los juntamos la despedida será intermitente mientras nos miremos. 

Adiós con sangre, adiós cuando las velas se apaguen. Nos tenemos y no nos podemos. Adiós si alguna vez dijimos para siempre, si siempre fue un tonto juramento. 

Adiós con firmeza, adiós, desde luego.

Adiós en el momento en que nuestras rodillas tocaron el suelo, en el que los espejos se rompieron, adiós con mala suerte, adiós sin comerlo ni beberlo. Adiós por encima del hombro, adiós entrelazado entre nuestros besos. Adiós tejido a mano, adiós mecánico, adiós artificial, adiós forzado.

Nos despedimos en el fuego, adiós blanco, adiós despiertos, adiós en sueños.

A Dios, adiós.

Almas en un patio de juegos, sádicos, inevitables, juegos de muerte y desolación. Adiós en nosotros, adiós por saludo, por reencuentro.

Adiós, ¿te conozco de algo?


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