domingo, 22 de septiembre de 2019

Se monta en la máquina de viajar en el tiempo, sale y...

- Disculpe, ¿qué año es?

- Pues que año va a ser, vaya preguntas... dos mil dieciséis.

- Mierda, me he vuelto a equivocar de siglo

- ¿Cómo?

- Si, que no soy de éste siglo hombre, que yo no debería estar aquí.

- Pero... ¿está usted loco?

- No, los locos son ustedes. Son ustedes los que se conquistan en dos días y al tercero ya no se reconocen, sus para siempre no duran ni lo que se tarda en pronunciarlo y jamás llegan a explorar el alma de la persona que tienen delante. No les interesa, no les satisface, permanecen hambrientos.
Ustedes son los locos, yo solo soy consciente de lo frágiles que son los corazones, de las historias que cuenta si pega usted el oído al pecho del propietario y escucha el latido. Sé lo que vale una mañana enmarañado en la melena de una persona que te apoya y te comprende en una vida de disgustos e imprevistos. Si por puertas decimos corazones ustedes entran derribándolas, sin pedir permiso. Qué mejor que acariciar el pomo con delicadeza y preguntar antes, ¿se puede?
Ustedes son lo locos, yo solo soy alguien que sabe que somos humanos y que perseguimos el amor hasta el final.

(Texto de 2016)


Eclipse

Hay un caballo corriendo en mi mente. Se aleja de mi frente al galope y cabalga sobre los cuerpos callosos, las circunvalaciones de mi encéf...