martes, 31 de julio de 2012

Blog nº1

El miedo. Nos paraliza, nos atrapa, nos deja sin palabras, los huevos acaban de corbata. Miedo. Es aterrador para mí escribir esto sin estrellas en el firmamento nocturno, demasiado oscuro ésta noche, para mi gusto, claro.

Un intento de demostrar la genialidad tan inútil en estos momentos que mi sesera guarda junto a mis encantos de plebeyo. El culo de un buen whisky y el cenicero repleto de platos rotos, cóctel perfecto, pobres bastardos.
Consejo: no lamáis culos ajenos y no metáis tanto la cabeza en el vuestro como para no ver la luz del sol nunca más.

No a las drogas, niños.
Respeto.
PD. añoranza de coño invade mi alma en melancólicas horas de desesperanza.

Eclipse

Hay un caballo corriendo en mi mente. Se aleja de mi frente al galope y cabalga sobre los cuerpos callosos, las circunvalaciones de mi encéf...