viernes, 7 de octubre de 2016

No eres de esas que no son

No eres de esas que se ponen vestido por si la aventura surge de entre los adoquines y tienes que correr, saltar o Dios sabe qué. Y solo te los pones cuando acompañas con manoletinas o tacones, cuando es obvio que la aventura no exigiría proeza física y que si lo hace te quitarás hasta el último trapo que adorne tu cuerpo.

No eres de esas que se meten, que se burlan, que se ríen de las personas que sufren de alguna discapacidad, física, psíquica o social. No eres tampoco de las que sienten lástima y quieren romper a llorar. Eres de las que ayuda si puede y continua su camino si no debe, si ya está atendido, que por el simple hecho de ser así no se requiere un teatro de lágrimas ni preocupaciones.

Que no eres una niña.

No eres de esas que viven y no piensan, tampoco eres de las que viven y piensan y no reflexionan sobre lo pensado. Eres de las que filosofan porque puede y quiere estallar su cabeza hasta ser la mejor versión de si misma. Quieres poder valerte por ti misma sin ser consciente de todos los superpoderes que tienes, sin ver, desde ahí arriba, como pasas volando sobre nuestras cabezas.

No eres de esas que no lloran. Porque lo haces, los dos lo sabemos. Lloras y te caes, porque eres humana y preciosa por eso. Eres preciosa cuando estás sentada en el suelo con la cabeza entre las rodillas y te veo, juro que veo como luchas con todas tus armas, que son poco menos que todo un ejército, para levantarte y sonreír.

A veces, simplemente, no puedes. Eres humana, eres preciosa.

No eres de esas que viven encerradas en un mundo que las somete, no eres de las que como tú, son mujeres y parecen no querer demostrar que por el hecho de serlo no tienen que pedir perdón. Que no tienen que pedir nada, que son como somos todos, carne y hueso. Que dan vida si se les antoja un día. ¿Algún hombre en la sala puede si quiera soñar con eso?

Que eres una mujer y sabes que puedes con ello. Que si te nace la gana te nace un hijo y cambias el mundo.

No eres de esas que critican a los demás cuando no miran. No insultas, no envidias, no arañas.

No eres de esas que no leen, que no se sientan jamás bajo las estrellas y me agarras con tus ojos y me cuentas lo que crees que hay allá arriba. No eres de esas que me dan su opinión sobre la vida y termina antes de treinta segundos. Joder, no eres de esas y te amo por ello.

No eres de esas que juegan a conocer gente, a querer a gente, a despedirse de gente. No eres de las que se levantan un día y al siguiente son personas diferentes.

Eres de las que te sonríen desde la esquina y un año después lo hacen desde la cama. Eres de las que no te hacen sentir inseguro y te acompañan de la mano en ese camino que es descubriros y fortaleceros a base de risas y llantos recostados en el pecho del otro.

Eres de las que me hacen reír sin final y me da un mordisco en la mejilla cuando no puedo parar.

Eres de esas a las que se ama por encima de todas las cosas.

Eres de esas que no existen.


Eclipse

Hay un caballo corriendo en mi mente. Se aleja de mi frente al galope y cabalga sobre los cuerpos callosos, las circunvalaciones de mi encéf...